SABER QUÉ QUIERO INCORPORAR EN MI EQUIPO
A la hora de realizar una incorporación a un equipo, estamos jugando con muchas variables y elementos de los cuales la mayoría son ignorados o simplemente se desconocen, es muy importante saber y conocer preguntas clave para poder saber qué es lo que necesitamos? ¿Cómo? ¿Por qué? ¿Para quién? ¿En qué momento? etc. Estas preguntas no son fáciles de encontrar en las incorporaciones, y muchos menos lo será acertar a la primera o satisfacer nuestras necesidades y las del nuestro entorno. Incorporar a un jugador a un equipo, es mucho más que realizar una transacción y darle la bienvenida. Hay gran variedad de aspectos y elementos a tener en cuenta detrás de cada ente que participa y se ve afectado en la operación. Factores ambientales, factores sociales, psicológicos, y de estos no en general, sino también de cada individuo por separado. Tan importante es en el caso individual (que no se estudia lo suficiente) como en el caso grupal, que parece que aún se analiza menos.
En este tema, hablaré y puntualizare algunos consejos o ideas, maneras de estructurar y poner en práctica un ejercicio de esta magnitud, teniendo en cuenta factores y elementos que no podemos permitir que se nos escapen.
Un jugador debe tener unas características, virtudes, aptitudes, valores, etc. , es decir, conjunto de elementos y cualidades adecuadas para nuestro equipo, intereses y objetivos, pues por eso nos fijamos en él y pensamos que sería una buena incorporación, y del mismo modo el equipo debería tener unas cualidades optimas que se ajusten al jugador o, por lo menos, facilitar esa adaptación y asimilación del nuevo entorno y elementos que formaran parte del medio de trabajo de ahora en adelante, compañeros, cuerpo técnico, ambiente de trabajo, etc., los dos lados deben estar preparado para acoger y aceptar los cambios y desarrollo que se producirán con la incorporación del jugador.
Cuando se habla del equipo, hay que destacar el papel del cuerpo técnico que también debe conocer todas estas cosas, a nivel inter-jugadores e intra-jugadores. En las instituciones donde existen las directivas y diferentes niveles de jerarquías, es importante que haya comunicación y se lleguen a consensos entre las partes que integran esa idea de nuevo proyecto para que pueda tener posibilidades de ser un éxito. El consenso es muy importante, no queremos imponer nuestra realidad o punta de vista, entre todo el grupo deberán llegar a un consenso, a una idea o razonamiento y trabajar con esta.
Es muy importante también reconocer y saber escuchar las opiniones del resto del equipo, muchas veces las incorporaciones o son exigidas por la directiva o por el cuerpo técnico, y muchos integrantes del equipo se limitan a dar la bienvenida a elogiar dicha incorporación porque es el trabajo que les toca hacer, desconocen ese jugador, esa persona, y se les impone muchas veces el convivir con ellos y el trabajar en equipo. Creo que hay que destacar la importancia del entorno, de los compañeros para que una incorporación tenga éxito o no se convierta en un problema, no solo para el técnico, sino también para el equipo en general. Es una oportunidad que se deja escapar muchas veces, y en muchas ocasiones, el equipo tiene mucho más que decir que la directiva o cuerpo técnico, y sus necesidades son también importantes.
Resumiendo, queremos que tanto cuero técnico, como directiva, como el resto del equipo trabaje y tengan presente la incorporación de nuevos jugadores, siempre analizando variables fisiológicas, psicológicas, personales, profesionales, saber evaluar cada situación en sus diferentes ámbitos y dominios.
Para ello, el primer paso es saber que queremos. Y necesitamos conocernos a nosotros, y poder averiguar que necesidades necesitamos cubrir. Por eso la importancia de la comunicación entre las diferentes jerarquías y niveles de la entidad, y el llegar a un consenso y compartir puntos de vista. Cuando sabemos que necesitamos, es hora de ponernos a buscar.
Para buscar, a la hora de observar, distinguiremos tres fases, debemos recoger y detectar la información, analizarla y tomar una decisión o selección. Es importante distinguir el papel y funciones de cada jugador, distinguiremos según posiciones (portero-defensa-medio-delantero), roles (líder, luchador, trabajador, amigo, etc.), según habilidades técnicas y tácticas. Si sabemos que lo necesitamos o buscamos, deberemos enfocarlo desde los diferentes puntos de vista que éste nos puede ofrecer a nosotros.
1-RECOGIDA y DETECTAR INFORMACIÓN
De cada posición querremos unas cualidades, necesitaremos cubrir unas necesidades, unas habilidades técnicas y tácticas, nivel de futbol determinadas, un rol que jugar, etc. que el jugador deberá tener. Recogemos dicha información, y posteriormente debemos distinguir esas cualidades y luego detectarlas en aquellas incorporaciones que nuestro equipo necesita o quiere.
- Según posición en el terreno de juego
Según la posición donde queremos que juegue la nueva incorporación, solemos buscar unas características específicas y comunes de dichas posiciones. En un equipo de futbol 11, algunas de ellas podrían ser estas:
Porteros: buena colocación, activación y tensión, ágil, alto, etc.
Defensas: anticipación, balón jugado, cortar balones, juego aéreo, corpulencia, juego largo, etc.
Medios: balones cortos y largos, cambios de juego, control del balón, cortes, uso del cuerpo, velocidad, etc.
Delanteros: velocidad, buen remate, uso del cuerpo, regate, explosivos, etc.
- Según Roles
Independientemente de la posición, cada jugador puede jugar un rol o papel dentro del equipo, a sea en los entrenamientos, vestuario, banquillo, dentro del campo, como institución o imagen del equipo, etc.
Líder y tipos de líder, estas figuras se destacan por encima de los demás en dichas habilidades y roles, y son fuente de inspiración y ejemplo para los demás. Saber delegar, dar órdenes y corregir, inspirador, creativo, observación y capacidad de control, cohesión, comunicación, resolutivo, etc. Es totalmente compatible que haya diferentes líderes o estandartes para diferentes roles, siempre que haya buena sinergia y se adapten a las necesidades del equipo y sean conscientes de sus responsabilidades.
Independiente de la posición de líder, podemos encontrar también estos u otros roles en los integrantes del equipo: creativos, comunicativos, especialistas, aquellos que saben y entienden las ordenes, conocen su función y adaptan a las necesidades del equipo, es consciente de las necesidades del equipo y están por encima de las suyas, trabajador, el que anima, aquel que sabe ver el lado positivo siempre, aquel que corrige siempre con ánimos y con elementos positivos, etc.
- Habilidades técnicas:
Habilidad que adquieren y entrenan los jugadores y cómo se resuelven en los entrenamientos y en los partidos o competiciones, qué y cuántos recursos poseen y cómo y cuándo los ponen en práctica, cuales son útiles y cuáles no, cuáles faltan en nuestro equipo, etc.
En un equipo de futbol 11, algunas de ellas podrían ser estas: control del balón, regate, pase, conducción de balón, uso del cuerpo, gran salto, resistencia, etc.
- Habilidades tácticas:
Habilidades y capacidad de entender el deporte, el ejercicio y actividad física en los diferentes momentos de los partidos y competiciones, conocimientos del rival, de los compañeros, etc. Dichas habilidades muchas veces vienen enseñadas o mostradas por el cuerpo técnico, pero los jugadores también pueden y deben aprender a manejar y tomar el control de estás habilidades.
En un equipo de futbol 11, algunas de ellas podrían ser estas: leer el juego, fases del partido, tipos de esquemas, contrataque, defensivo, verticalidad, jugadas de estrategia (saques de esquina, banda y faltas al borde del área) etc.
Estos cuatro grupos podrían ser un ejemplo de distintos niveles en los que vemos como queremos que se estructure nuestro equipo y gire en torno a dichos valores y cualidades, pero estos cuatro niveles también puede interaccionar entre sí, podemos estar buscando incorporaciones que cumplan requisitos o posean elementos de uno o más niveles, pudiendo interactuar entre ellos y creando perfiles mucho más específicos y con mayores cualidades que se puedan adaptar a nuestro equipo.
METODO AHP (analítico jerárquico) – Pensamiento sistémico
Otra manera de observar las cualidades de los jugadores, y ver como pueden encajar en nuestras necesidades seria lo que se dice realizar un estudio de números, de matemáticas y estadísticas. Existen algunos métodos como el AHP, o pensamientos sistémicos donde las variables y optativas que manejamos son un conjunto d estadísticas y cifras que se relacionan y operan entre sí para darnos el valor de dichas habilidades o capacidades según el criterio que nos interese. Es una selección de objetivos, se puede adaptar como método de ayuda en decisiones, en función de criterios y alternativas. Ponderando de los criterios, definirlos y decidir si todos ellos influyen en el interés de la alternativa o bien influyen en porcentajes distintos.
De esta manera, obtenemos un valor y ponderación del deportista, según diferentes características, en definitiva, utilizar las matemáticas y las estadísticas para elaborar unos valores que nos permitan escoger aquel más alto o que mejor nos venga. Algunas categorías pueden ser características personales del jugador, deportivas, valor de mercado y temas de contratos, publicidad, etc. Todo según las necesidades que tengamos con nuestro equipo y cómo queremos que afecte su incorporación.
El estudio basado en un pensamiento sistémico, se trata de ver a los jugadores por sus números, podríamos hablar de ratio de efectividad (tiros a puerta/goles), pases bien dados/mal dados, asistencias, recuperaciones vs perdidas, y como estas afectan o no a las vitorias del equipo (ratio de contribución), estadísticas de metros recorridos, balones recuperados, % de actuación por minutos, titularidades vs suplencias, etc.
Hay que resaltar que estas ponderaciones, valores y estimaciones son solo numéricas, estadísticas y resultados aproximados o dentro de una media, lo que no nos garantizan que su aportación, aun habiendo hecho cálculos y evaluaciones correctas, sea el deseado o el mismo que esperábamos. Este método de captación de información lo recomendaría para entidades y equipos con objetivos y aspiraciones empresariales o económicas, pero si puede ser un complemento para los cuatro niveles antes comentados.
2-ANÁLISIS Y DECISIÓN
Una vez tenemos la información necesario sobre las incorporaciones o nuevos jugadores, es hora de realizar un análisis utilizando, por ejemplo, los niveles y criterios del apartado anterior y ahora introducir las variables y elementos que ya tenemos en nuestra entidad o estructura de equipo, es hora de ver cómo podrían funcionar dichas incorporaciones cuando se incorporan y unen a diferentes roles, ambientes, habilidades, características, objetivos, etc.
CONSENSO/COHESIÓN DEL GRUPO
Del mismo modo que nosotros observamos, evaluamos y tomamos una decisión sobre el jugador, está claro que el cuerpo técnico debe hacerlo también, es tarea del equipo multidisciplinar el evaluar y conocer al equipo pero… ¿y el resto del equipo? ¿Son los jugadores también participes de la integración, aceptación, cohesión y desarrollo de este nuevo jugador y compañero? Y podemos empezar por aquí, ¿lo ven como un nuevo jugador, compañero?, ¿o es un competidor para ellos? ¿Qué clase de rol acabará teniendo, es compatible y aceptado por los demás roles? ¿Qué habilidades técnicas y tácticas del nuevo jugador se verán reforzadas o mermadas por la interacción con los nuevos jugadores? ¿Quién debe posicionarse y de qué manera para la buena adaptación del jugador? ¿El líder, el conjunto del equipo, sus compañeros de selección? ¿El compañero de posición? Todos estos aspectos y elementos son importantes de analizar antes de tomar una decisión.
Para ello, es recomendable el uso de futuras estrategias y ejercicios de trabajo en grupo, teambuilding, cohesión, o un acercamiento y conocimiento mutuo entre jugadores-técnicos más profundo.
Algunos ejemplos de trabajo de grupo que pueden funcionar son la búsqueda y acercamiento de los objetivos. Se trata de exponer y discutir con todos los integrantes del equipo los distintos objetivos, y a cuales se quiere llegar. Es importante que esos objetivos simbolicen y exijan el mismo esfuerzo por parte de los diferentes partes del equipo, se debe sacrificar lo mismo. El establecer objetivos puede ayudar a fomentar la interacción y conocimiento entre los jugadores, a conocer cuál es su papel y deber dentro del equipo y al ayudo mutuo en beneficio del equipo, que al final es elemento fundamental y que queremos fomentar.
Implicación vs Compromiso
Hay que diferenciar entre implicación y compromiso. Los jugadores pueden estar implicados, pero aquellos comprometidos estarán dispuestos a darlo todo y a sacrificarse por completo, pagando todo el precio que cuestan sus objetivos, estarán dispuestos a exigirse lo pactado, mientras que la implicación no significa cumplir con todo lo que conlleva lo establecido. Es importante resaltar el hecho de que en un equipo, el resultado y éxitos no dependen de uno solo, sino del conjunto de los integrantes del equipo, si incorporamos un jugador que está dispuesto a darlo todo, a comprometerse, asegurémonos de que su entorno también lo hará, y viceversa. Un desequilibrio en este aspecto puede suponer el fracaso, pérdida, frustración y pérdidas de objetivos del conjunto del equipo.
Algunos medidores y herramientas que pueden ayudarnos con el compromiso dentro de un equipo puede ser trabajar y estudiar la motivación, las necesidades, etc. del equipo y sus integrantes. Se pueden realizar ejercicios para establecer el compromiso del equipo, por ejemplo elaborar estrategias o niveles distintos según las características del equipo. El primero sería consensuar nivel de compromiso, otro nivel sería el de agrupar por nivel de compromiso (grupo que haya trabajo la cohesión) y por último el contagiar nivel de compromiso (resaltar la importancia de un líder consolidado). Trabajar con el compromiso, marcar objetivos de destino nivel, coste de cada uno, consensuar, y finalmente exigir el compromiso a lo largo de todo el ejercicio.
TALENTOS
El tema de los talentos es un tema muy delicado. El talento, como todo, debe evaluarse según las características del entorno del jugador y de muchas otras variables. Un talento es una predisposición fisiológica, psicológica o física para realizar ciertas actividades, realizar disciplinas y desarrollaras. Aun así, el talento no lo es todo, hay que entrenarlo y adaptarlo, mimarlo para llevarlo a un desarrollo que nos interesa y sacar su potencial, entrenar, adaptación, eficiencia, capacidad, necesidad, esfuerzo, son palabras que no hay que dejar de lado cuando nos encontramos con un talento.
Noticias, prensa, rumores sobre la aparición de nuevos talentos son cada vez más comunes, pero son muchos los que o bien se quedan en promesas o simplemente eran un jugador más. Recomendaría a una entidad que no elaborase ni tomase sus decisiones en base a elementos externos, sino que elaborase sus propios informes, sus propias observaciones y análisis al respecto (y eso incluye tener en cuenta la opinión de todo el equipo).
Por eso mismo, un talento puede no funcionar una vez el entorno y características de la nueva vida deportiva han cambiado, no sabemos cómo ha afectado esto a la cognición ni habilidades del jugador, y si tendrá recursos para adaptarse, trabajar, desarrollarse, etc. Lo que buscamos es la actitud correcta para nuestro equipo, la que debe mostrar el jugador con su nuevo entorno, compañeros, equipo, y vida. Para ello, no solo necesitamos talentos, sino también una disciplina y entrenar habilidades, aptitudes, competencias y capacidades.
La mentalidad de los jugadores es esencial, una mentalidad fija o una mentalidad con ganas de crecer son la diferencia entre que un talento siga trabajando e incorpore el esfuerzo, el trabajo personal, etc y supere las adversidades y desarrolle nuevas capacidades y mejores resultados, o por el contrario, se estanque en la idea de que sus resultados no pueden cambiar ni modificarse, y se estanque allí y a diferencia de sus compañeros, no evolucione ni desarrolle nuevas y mejores aptitudes. Los compañeros, nuevamente son también un elemento fundamental y de mucha importancia a la hora de ayudar a dichos talentos a seguir evolucionando.
Cuando hemos llegado a un consenso entre los integrantes del equipo, y tomamos la decisión de incorporar a un nuevo jugador, llegas la hora pues, de trabajar con este nuevo jugador y el resto del equipo.
Bibliografia:
Pep Marí. (2017). Liderar equipos competitivos. Barcelona: Plataforma Editorial.
Dr. Aznar Jerónimo, Dr. Guijarro Martínez Francisco. (2013). Valoración de Futbolistas con el Método AHP. La Universidad Politécnica de Valencia. Recuperado de: https://www.edx.org/course/valoracion-de-futbolistas-con-el-metodo-upvalenciax-vf201x-1#!
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